Beneficios de la fruta deshidratada

 

LA FRUTA DESHIDRATADA

El beneficio más destacado de la fruta deshidratada es que aporta una gran cantidad de energía, ya que una ración de fruta deshidratada aporta a nuestra ingesta alimentaria unas 50-70 Kcal. Si tienes que elegir que sepas que las que más energía nos aportan son las uvas pasas, los higos y las ciruelas. Las frutas deshidratadas son una rica fuente de vitaminas y minerales, por eso es recomendable comerlas varias veces a la semana.  

La fruta deshidratada no es más que una pieza de fruta a la que se le ha extraído su contenido en agua mediante un proceso de secado o deshidratación. 

Este proceso reduce su tamaño y peso, lo que hace que sea fácil de llevar al trabajo o al entrenamiento para tomar como snack. También se producen cambios en su sabor que es mucho más dulce y en su textura, la cual se vuelve grumosa debido a la pérdida de agua. 

Existen diversas buenas razones para consumir fruta deshidratada, ya que son muchas las propiedades saludables de la fruta en este estado. 

BENEFICIOS

• Alto contenido en fibra, perfecto para regular nuestra digestión.  
• Carácter antioxidante lo que ayuda y mucho a la salud de nuestro corazón.  
• Eliminando toxinas, ayudándonos a disfrutar de una piel mejor y evitar de este modo el envejecimiento prematuro. 
• La fruta deshidratada también es apta para las personas diabéticas. 
• Ayuda a fortalecer los huesos ya que contienen calcio y la vitamina K que refuerzan los huesos y previenen el desarrollo de ciertas enfermedades relacionadas. 
• Puedes llevártela a cualquier parte en forma de snack 
• Las vitaminas y los minerales permanecen prácticamente intacto
• Aportan Energía Vital 
• Ofrecen una completa dosis de micronutrientes: Potasio, Calcio, Hierro, Magnesio, Provitaminas A y E, Vitaminas B1, B2, B3..., son micronutrientes que están entre 3 y 5 veces más concentrados en las frutas deshidratadas frente a las frutas frescas. 
• Son saciantes 
• Poder laxante 
• Ayudan a prevenir la anemia 

PROBLEMAS

Algunas de estas frutas deshidratadas contienen más azúcar de lo normal. Y es que, para hacerlas más deliciosas, muchas de las empresas que las fabrican añaden químicos y azúcares añadidos que no son nada beneficiosos para nuestra salud. Generalmente estos químicos están presentes en las frutas que naturalmente no son tan dulces, como los arándanos o las fresas. La consecuencia de consumir este exceso de azúcar puede contribuir a aumentar las posibilidades de sufrir diabetes, de tener problemas cardiovasculares y de que nuestra salud empeore.